viernes, abril 04, 2014
¡GRACIAS TORREÓN!
Fernando de la Mora Romo muy agradecido con Torreón |
Luego de media hora de espera, la Camerata de Coahuila inició un
gran concierto en la Plaza Mayor, que fue la culminación de un largo día
que tuvo de todo, calor, retrasos, sorpresas y niños sonrientes en las
fuentes de la Plaza Conmemorativa del Centenario de la Toma de Torreón.
Entre
ecos de la fiesta, una voz femenina anuncia el triunfo de Villa y su
entrada a Torreón, la gente atenta, muchos espectadores de pie en una
noche fresca, contentos de ver a su orquesta y la velada comenzó con una
obertura de ópera.
La Secretaría de Cultura de Coahuila ha
logrado las dos presentaciones que ha tenido la Camereta de Coahuila que
dirige desde su fundación Ramón Shade.
Luego de tocar la obertura de la Cenicienta, de Gioacomo
Rossini, se escuchó un popurrí napolitano, fue la voz de Fernando de la
Mora, al comenzar “O Sole mio”, todos callaron y voltearon a verlo, unos
querían atender mejor, dejaron de platicar.
Una señoras
cantaron con el tenor mexicano “Torno a Sorrento” y en la interpretación
de “Parlame di amore mariu".
“Ya no me quieres” fue la primera canción
de María Greever en el concierto, los enamorados se abrazaron más
fuerte, muchas personas mayores suspiraron, otros cantaron con de la
Mora y algunas personas que no alcanzaron silla, se sentaron en el
suelo, era su fiesta y no estarían incomodas.
De la mexicana María
Greever, primero el tenor anunció “Ya no me quieres”, la canción de
cuna “Muñequita Linda”
Luego llegaron, la poco conocida “Qué dirías de mí” y
“Júrame”, que fue la canción más aplaudida de la noche, mientras que el
“Huapango” de Moncayo, uno de los himnos nacionales, sirvió como
descanso para el tenor.
De la Mora regresó al escenario para
interpretar de Consuelito Velázquez, “Bésame mucho”, que dijo el
cantante, “ha hablado por México en el mundo”, para estrenar en Torreón
“Amor de mis amores” y “Palmeras” de Agustín Lara, a ritmo de cha cha
chá.
En “Cuando vuelva a tu lado”, el cantante pidió al público que lo acompañara.
La “Suite Mexicana” de Eduardo Angulo, sirvió como el último descanso al artista de la ciudad de México.
Para
el extraordinario final, se incluyó “No se tú”, “Mía” y “Como yo te
amé” de Armando Manzanero y “Granada” de Agustín Lara. Cuando los
aplausos estaban por terminar, comenzó la fiesta de los fuegos
pirotécnicos.