viernes, abril 24, 2009
PROFRA. ELBA ESTHER GORDILLO MORALES MENSAJE
Muy buenos días a todos y cada uno de ustedes, y en particular, a estos niños, a estos jóvenes; a estos niños que demuestran la fortaleza de nuestro futuro y lo que dijera, o lo que yo digo como maestra de este estado, en esta entidad federativa, doblemente México.
Me da mucho gusto saludarlo, señor Presidente, con el aprecio y respeto de todo el magisterio nacional, licenciado Felipe Calderón Hinojosa.
Me da gusto también, señor Secretario de Educación.
Saludar como siempre, con respeto, con calidez al gobernante de esta entrañable entidad, el licenciado Enrique Peña Nieto.
Queridas maestras, queridos maestros, señores padres de familia, amigos y amigas, todos:
No podría empezar este discurso sin decir que me siento entrañablemente emocionada. De esta entidad empecé a entender la necesidad de elevar la calidad de la educación y entender que la educación pública para ser altamente competitiva y lograr equidad, justicia, productividad; la única manera de defender a nuestra escuela pública era dándole calidad.
Estoy muy orgullosa de estar aquí, porque aquí tengo compañeros con los que me inicié en la lucha sindical, los que jamás me han dejado sola, y sé que en esta nueva alianza, en esta nueva hazaña que tenemos que acometer, seguiremos juntos.
A través de ustedes saludo entrañablemente a todo el magisterio nacional. Les convoco a que ahora, a 20 años de haber asumido el liderazgo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, demostremos una vez más que nuestra vocación es por la educación al servicio del pueblo; demostremos que nuestro amor hacia nuestros niños y nuestros jóvenes no está en condiciones de privilegios, no está en condiciones de rebatingas ni nada que nos avergüence. Estamos porque amamos y queremos a México.
Señor Presidente:
Hemos decidido hace mucho tiempo que nuestro sistema educativo fuese evaluado, y hace varios años, más de seis, se estableció el Instituto de Evaluación, donde evalúa la sociedad, donde está el Gobierno, donde está también la organización sindical, y no hubo resistencia del gremio de los trabajadores de la educación; todo lo contrario, aportamos lo mejor de nosotros. No el SNTE, sino la esencia del SNTE, los maestros y las maestras de México, para someterse a la evaluación.
Aquí está la Prueba ENLACE, Prueba ENLACE que tiene con ésta la cuarta participación. Aquellos que debaten que teníamos temor a ser evaluados, educandos y maestros, aquí está el ejemplo; estamos dispuestos a hacerlo, pero sin descalificaciones, sin agravios, sin humillaciones.
Mucho nos falta, compañeras y compañeros, para lograr la hazaña inequívoca, comprometida, plena y responsablemente con la Patria, por sobre todo con la Patria y con quien representa las instituciones de nuestro país.
Señor Presidente:
Sin rubor, sin duda, sin complejos, le decimos que somos sus aliados, que vamos por la Alianza de la Calidad Educativa; que estamos dispuestos a poner lo mejor de nosotros; que lo haremos con pasión, con emoción, con entrega; que habrá flexibilidad laboral; que no tenemos duda; que sabemos que vamos a perder algunos privilegios, y reconocemos que al interior del gremio hay grupos que no la aceptan, pero se convencerán que es la manera de servir a México y lograr la justicia y la equidad, la tolerancia, la democracia, la dignidad humana que nos merecemos.
Que, sobre todo, aprenderemos a amar a México, y amando a México, amar lo universal; a cuidar la naturaleza, a responder a la necesidad de una era de conocimientos, de dominio de actividades manuales, de creatividad, de acciones artísticas.
En este estado, donde me hice como dirigente, donde me consolidé como maestra, al que amo entrañablemente, pero donde también entiendo que el Estado de México no es toda la Patria; sino una parte de la Patria; a 20 años de que legal, legítimamente, por voto secreto, asumí la conducción de mi gremio, vuelvo a decirle, señor Presidente, no tenemos otro compromiso más que con usted y con la Patria.
Muchas gracias.
Me da mucho gusto saludarlo, señor Presidente, con el aprecio y respeto de todo el magisterio nacional, licenciado Felipe Calderón Hinojosa.
Me da gusto también, señor Secretario de Educación.
Saludar como siempre, con respeto, con calidez al gobernante de esta entrañable entidad, el licenciado Enrique Peña Nieto.
Queridas maestras, queridos maestros, señores padres de familia, amigos y amigas, todos:
No podría empezar este discurso sin decir que me siento entrañablemente emocionada. De esta entidad empecé a entender la necesidad de elevar la calidad de la educación y entender que la educación pública para ser altamente competitiva y lograr equidad, justicia, productividad; la única manera de defender a nuestra escuela pública era dándole calidad.
Estoy muy orgullosa de estar aquí, porque aquí tengo compañeros con los que me inicié en la lucha sindical, los que jamás me han dejado sola, y sé que en esta nueva alianza, en esta nueva hazaña que tenemos que acometer, seguiremos juntos.
A través de ustedes saludo entrañablemente a todo el magisterio nacional. Les convoco a que ahora, a 20 años de haber asumido el liderazgo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, demostremos una vez más que nuestra vocación es por la educación al servicio del pueblo; demostremos que nuestro amor hacia nuestros niños y nuestros jóvenes no está en condiciones de privilegios, no está en condiciones de rebatingas ni nada que nos avergüence. Estamos porque amamos y queremos a México.
Señor Presidente:
Hemos decidido hace mucho tiempo que nuestro sistema educativo fuese evaluado, y hace varios años, más de seis, se estableció el Instituto de Evaluación, donde evalúa la sociedad, donde está el Gobierno, donde está también la organización sindical, y no hubo resistencia del gremio de los trabajadores de la educación; todo lo contrario, aportamos lo mejor de nosotros. No el SNTE, sino la esencia del SNTE, los maestros y las maestras de México, para someterse a la evaluación.
Aquí está la Prueba ENLACE, Prueba ENLACE que tiene con ésta la cuarta participación. Aquellos que debaten que teníamos temor a ser evaluados, educandos y maestros, aquí está el ejemplo; estamos dispuestos a hacerlo, pero sin descalificaciones, sin agravios, sin humillaciones.
Mucho nos falta, compañeras y compañeros, para lograr la hazaña inequívoca, comprometida, plena y responsablemente con la Patria, por sobre todo con la Patria y con quien representa las instituciones de nuestro país.
Señor Presidente:
Sin rubor, sin duda, sin complejos, le decimos que somos sus aliados, que vamos por la Alianza de la Calidad Educativa; que estamos dispuestos a poner lo mejor de nosotros; que lo haremos con pasión, con emoción, con entrega; que habrá flexibilidad laboral; que no tenemos duda; que sabemos que vamos a perder algunos privilegios, y reconocemos que al interior del gremio hay grupos que no la aceptan, pero se convencerán que es la manera de servir a México y lograr la justicia y la equidad, la tolerancia, la democracia, la dignidad humana que nos merecemos.
Que, sobre todo, aprenderemos a amar a México, y amando a México, amar lo universal; a cuidar la naturaleza, a responder a la necesidad de una era de conocimientos, de dominio de actividades manuales, de creatividad, de acciones artísticas.
En este estado, donde me hice como dirigente, donde me consolidé como maestra, al que amo entrañablemente, pero donde también entiendo que el Estado de México no es toda la Patria; sino una parte de la Patria; a 20 años de que legal, legítimamente, por voto secreto, asumí la conducción de mi gremio, vuelvo a decirle, señor Presidente, no tenemos otro compromiso más que con usted y con la Patria.
Muchas gracias.