martes, enero 06, 2009
CANTO A LA ENFERMERA
A ti va mi canto, mi fiel compañera,
Mujer que me auxilias en noble misión.
Con odas hermosas, cantar yo quisiera
Los actos heroicos de tu profesión.
Siendo casi niña, ofrendaste gozosa
El bello perfume de tu juventud.
Aceptaste lucha y vida azarosa,
Ya que el sacrificio es tu excelsa virtud.
Juraste en tu inicio, servir con ternura,prodigar doquiera paciencia y bondad.
Cuidar del enfermo con santa dulzura,
Derramar tus dones a la humanidad.
Tus cálidas manos son bálsamo tibio.
Restauras heridas, curas con unción.
Con tu vida misma procuras alivio
Al ser desvalido: ¡Sublime misión!Amigo o enemigo, le tiendes la mano.
Le besas la frente, calmas su dolor.
No importa quién sea: Es un ser humano
Que ávido implora un poco de amor.
Verás pasar años, los meses y días
Mientras caen marchitas hojas de tus huertos.
Verás que se olvidan bellas melodías
Mientras das tu vida en tantos cuerpos yertos.
Sabrás de alegrías sublimes y puras
Que premien con creces lo que hayas sufrido.
Otras veces tu alma sabrá de amarguras
Al ver que se muere tu enfermo querido.
Habrá duras pruebas para tu entereza:
Gente que te hiera sin haber razón.
No desmayes nunca, sigue con firmeza
Al clímax supremo de tu vocación.
Y no quieras siempre pedirle a la vida
Grandes recompensas, medallas y honor.
El hombre es mezquino y pronto se olvida:
Te paga desprecios cuando das amor.
Mas no por insultos, inicuos fantasmas,
Te des por vencida y pierdas la fe.¡
Tu estás por encima de todos los miasmas,pues tienes el alma que lucha y que cree!
¡Si muchos se olvidan, yo sí te venero!
¡Contigo, sin miedo, yo quiero luchar!
Acepta mi brazo, humilde y sincero:
Sabremos unidos perder y triunfar.
Si anónima quedas llegado tu invierno
Y nadie se duele de tu soledad,
No te vayas triste. ¡
Hay un Dios Eternoque habrá de premiarte en la eternidad!
¡A ti va mi canto, dulce compañera,mujer que ayudas en noble misión,que Dios te bendiga, mi fiel
enfermera:ésta es mi ferviente y constante oración.