viernes, enero 25, 2008
EL TRIUNFO DEL ACADEMISMO
Mario Gàlvez Narro
Los universitarios de la Universidad Autónoma de Coahuila deben sentirse satisfechos del ejemplar proceso electoral que llevaron a cabo ayer en sus 17 escuelas y facultades, ya que se despejaron completamente los nubarrones de violencia que se preveían en vísperas de la jornada comicial, lo que permitió realizar elecciones democráticas y participativas. Al momento de redactar estas líneas, de acuerdo a información proporcionada por la presidenta exoficio de la Comisión Electoral, Rosa María Franco Parra, cerrada ya la votación en 16 escuelas y facultades y faltando solamente Derecho por computarse, Manuel Martínez Gallegos llevaba contabilizados 6 mil 980 votos, lo que representaba el 78 por ciento de los sufragios emitidos, en tanto que Davis Cázares Juárez llevaba contabilizados mil 969 votos, lo que representaba el 22 por ciento de los votos sufragados. Con excepción de la manifestación realizada por algunos alumnos de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, que protestaban por un asunto interno, la jornada electoral se desarrolló en completa calma en todos los recintos universitarios y con una participación estimada en más de 60 por ciento de la comunidad estudiantil y del profesorado. Para bien de la institución se despejaron las amenazas de violencia y de elevado abstencionismo que algunos temían que se presentaran durante la jornada.Las quejas externadas por Cázares Juárez en el sentido de que el proceso era parcial ya que a él no se le habían podido acreditar representantes, fueron atendidas con ánimo ejemplar por parte de la Comisión Electoral ya que primero se le dieron 3 días de prórroga para que acreditara a sus representantes, pero al no poder acreditarlos en el plazo límite la Comisión le amplió el margen 3 horas adicionales. Como el nuevo plazo terminó, antenoche a las 11 p.m la Comisión tomó el acuerdo extraordinario de extender hasta ayer a las 8 de la mañana, es decir cuando el proceso ya estaba en marcha en toda la universidad, el plazo de acreditación de los representantes de Cázares Juárez a fin de brindar las mayores condiciones de equidad entre ambos contendientes. A las 7 de la mañana de ayer el exdirector de Derecho y exdelegado de la Procuraduría de Justicia presentó 26 propuestas de representantes ante la Comisión Electoral, de las cuales se aprobaron 21 ya que las otras 5 no cumplían con los requisitos de la convocatoria.Esta circunstancia lo que pone de relieve es la falta de arraigo de Cázares en la universidad, lo que es enteramente comprensible si se toma en cuenta que lleva escasos 9 meses de haber retornada a la UA de C como académico, luego de estar más de 7 años como funcionario estatal.El triunfo de Martínez Gallegos es celebrable pues representa la continuidad de un proyecto académico que lleva 20 años de vigencia en la universidad, que se inició en los aciagos años 80 durante la coordinación de Salvador Hernández Velez y que ha permitido a la institución no sólo ubicarse entre las 10 mejores a nivel nacional, sino contar con una Ciudad Universitaria y sobre todo recobrar la confianza de la sociedad y del sector empresarial.Esos cambios -cuantitativos y cualitaivos- han permitido que los estudiantes y egresados de la UAC se midan al tú por tú con los de las demás instituciones de educación superior de la región, y en no pocos campos ser los mejores o estar entre los mejores. Por eso puede decirse que los principales beneficiarios del resultado electoral de ayer son y serán los verdaderos universitarios, los que podrán continuar con un academismo de mayor profundidad y con estándares de calidad cada vez más exigentes. La certificación de todas las escuelas y de todos los planes de estudio han sido pasos trascendentales en favor de una educación pública de la mayor calidad, pero falta por consolidar el trabajo académico. El triunfo de Martínez Gallegos es el triunfo del academismo, por eso debe celebrarse
Los universitarios de la Universidad Autónoma de Coahuila deben sentirse satisfechos del ejemplar proceso electoral que llevaron a cabo ayer en sus 17 escuelas y facultades, ya que se despejaron completamente los nubarrones de violencia que se preveían en vísperas de la jornada comicial, lo que permitió realizar elecciones democráticas y participativas. Al momento de redactar estas líneas, de acuerdo a información proporcionada por la presidenta exoficio de la Comisión Electoral, Rosa María Franco Parra, cerrada ya la votación en 16 escuelas y facultades y faltando solamente Derecho por computarse, Manuel Martínez Gallegos llevaba contabilizados 6 mil 980 votos, lo que representaba el 78 por ciento de los sufragios emitidos, en tanto que Davis Cázares Juárez llevaba contabilizados mil 969 votos, lo que representaba el 22 por ciento de los votos sufragados. Con excepción de la manifestación realizada por algunos alumnos de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, que protestaban por un asunto interno, la jornada electoral se desarrolló en completa calma en todos los recintos universitarios y con una participación estimada en más de 60 por ciento de la comunidad estudiantil y del profesorado. Para bien de la institución se despejaron las amenazas de violencia y de elevado abstencionismo que algunos temían que se presentaran durante la jornada.Las quejas externadas por Cázares Juárez en el sentido de que el proceso era parcial ya que a él no se le habían podido acreditar representantes, fueron atendidas con ánimo ejemplar por parte de la Comisión Electoral ya que primero se le dieron 3 días de prórroga para que acreditara a sus representantes, pero al no poder acreditarlos en el plazo límite la Comisión le amplió el margen 3 horas adicionales. Como el nuevo plazo terminó, antenoche a las 11 p.m la Comisión tomó el acuerdo extraordinario de extender hasta ayer a las 8 de la mañana, es decir cuando el proceso ya estaba en marcha en toda la universidad, el plazo de acreditación de los representantes de Cázares Juárez a fin de brindar las mayores condiciones de equidad entre ambos contendientes. A las 7 de la mañana de ayer el exdirector de Derecho y exdelegado de la Procuraduría de Justicia presentó 26 propuestas de representantes ante la Comisión Electoral, de las cuales se aprobaron 21 ya que las otras 5 no cumplían con los requisitos de la convocatoria.Esta circunstancia lo que pone de relieve es la falta de arraigo de Cázares en la universidad, lo que es enteramente comprensible si se toma en cuenta que lleva escasos 9 meses de haber retornada a la UA de C como académico, luego de estar más de 7 años como funcionario estatal.El triunfo de Martínez Gallegos es celebrable pues representa la continuidad de un proyecto académico que lleva 20 años de vigencia en la universidad, que se inició en los aciagos años 80 durante la coordinación de Salvador Hernández Velez y que ha permitido a la institución no sólo ubicarse entre las 10 mejores a nivel nacional, sino contar con una Ciudad Universitaria y sobre todo recobrar la confianza de la sociedad y del sector empresarial.Esos cambios -cuantitativos y cualitaivos- han permitido que los estudiantes y egresados de la UAC se midan al tú por tú con los de las demás instituciones de educación superior de la región, y en no pocos campos ser los mejores o estar entre los mejores. Por eso puede decirse que los principales beneficiarios del resultado electoral de ayer son y serán los verdaderos universitarios, los que podrán continuar con un academismo de mayor profundidad y con estándares de calidad cada vez más exigentes. La certificación de todas las escuelas y de todos los planes de estudio han sido pasos trascendentales en favor de una educación pública de la mayor calidad, pero falta por consolidar el trabajo académico. El triunfo de Martínez Gallegos es el triunfo del academismo, por eso debe celebrarse