martes, diciembre 18, 2007
LAS COMPLICIDADES DEL ALC0HOL
Mario Gálvez Narro
En una época como la actual, en donde el alcohol corre a raudales y en la que además hay un notable incremento en el tráfico vehicular como resultado de las fiestas decembrinas y el regreso de millares de paisanos, se ha hecho notable la ausencia de la agrupación NACE -No A Conducir Ebrio- en los operativos preventivos y de concientización para evitar manejar en estado de ebriedad. La asociación civil NACE, que dirige Nora González, ha desplegado ingentes esfuerzos en esa dirección desde hace años, y en la sociedad civil lagunera tiene un bien ganado reconocimiento de ser una agrupación sin fines de lucro que busca promover una mayor conciencia colectiva, en particular entre los jóvenes, sobre los graves riesgos que implica que un ebrio conduzca un vehículo. No es una agrupación que promueve entre la sociedad la abstinencia del alcohol, sino que advierte sobre los peligros que enfrenta el conductor ebrio y las gravísimas consecuencias que éste puede provocar. Por lo mismo, en una actitud más realista, NACE alienta la ingesta responsable entre los consumidores, pero también una actitud socialmente responsable de parte de los negocios dedicados a la venta y consumo de bebidas embriagantes, en particular entre las discos y los llamados antros. Con estos antecedentes, todo el mundo supondría que una campaña de NACE para esta época recibiría no sólo el beneplácito de la comunidad sino el respaldo económico que fuera necesario para llevarla a efecto; sin embargo, resulta que no, que ante la falta de apoyo sus integrantes se vieron obligados a cancelar la campaña decembrina que tenían proyectada, que de acuerdo a su presidenta incluía spots en radio, televisión, prensa, pantallas panorámicas, pláticas en escuelas y visitas a antros, con el objetivo de alertar a los jóvenes de los peligros de conducir en estado de ebriedad. Los efectos que esto habrá de acarrear sobre la comunidad son evidentes: más alcohol en las calles y en las casas, y en consecuencia mayores riesgos de accidentes de fatales consecuencias.La negativa del Ayuntamiento de Torreón de respaldar la campaña de NACE bajo el ridículo e inconcebible argumento de que "no hay dinero", merece pública condena porque con ello la autoridad municipal, léase José Ángel Pérez Hernández, se ubicó objetivamente del lado de quienes no les preocupa la inseguridad que provoca la ingesta inmoderada de alcohol en el municipio, es decir se ubicó del lado de quienes viven de emborrachar a los consumidores, no del lado de los intereses de la comunidad que supuestamente dice representar.Si el Ayuntamiento no apoyo a NACE con los recursos que solicitaba, en bien de la comunidad y en particular de los jóvenes en una época en la que tantos peligros acechan, no fue por falta de dinero como dijo el tesorero Enrique Sada, sino porque el interés del alcalde es proteger los intereses de las grandes empresas cerveceras por encima de los de la colectividad que dice representar. Habría que recordar que este año el Ayuntamiento ejerció un presupuesto de más de mil 300 millones de pesos, el más alto en la historia del municipio, por lo que decir a la agrupación NACE que "no hay dinero" es un insulto a la inteligencia y una declaración abierta de cuáles son los verdaderos valores sociales de la autoridad de Torreón, la promoción del alcoholismo y la defensa de los intereses de las cervecerías, que fueron algunos de los principales contribuyentes en la campaña electoral de Pérez Hernández.Organizaciones como NACE son de vital importancia para la comunidad, por lo que el trato que recibió del alcalde y su Ayuntamiento es totalmente inaceptable. Más, mucho más gasta el municipio en tonterías como aquella de Torreón Limpio, en el que se dilapidaron millones de pesos sin importar que este año se pagarán a PASA más de 90 millones por limpieza, que en lo que pedía NACE, apenas un millón. Es el colmo.
En una época como la actual, en donde el alcohol corre a raudales y en la que además hay un notable incremento en el tráfico vehicular como resultado de las fiestas decembrinas y el regreso de millares de paisanos, se ha hecho notable la ausencia de la agrupación NACE -No A Conducir Ebrio- en los operativos preventivos y de concientización para evitar manejar en estado de ebriedad. La asociación civil NACE, que dirige Nora González, ha desplegado ingentes esfuerzos en esa dirección desde hace años, y en la sociedad civil lagunera tiene un bien ganado reconocimiento de ser una agrupación sin fines de lucro que busca promover una mayor conciencia colectiva, en particular entre los jóvenes, sobre los graves riesgos que implica que un ebrio conduzca un vehículo. No es una agrupación que promueve entre la sociedad la abstinencia del alcohol, sino que advierte sobre los peligros que enfrenta el conductor ebrio y las gravísimas consecuencias que éste puede provocar. Por lo mismo, en una actitud más realista, NACE alienta la ingesta responsable entre los consumidores, pero también una actitud socialmente responsable de parte de los negocios dedicados a la venta y consumo de bebidas embriagantes, en particular entre las discos y los llamados antros. Con estos antecedentes, todo el mundo supondría que una campaña de NACE para esta época recibiría no sólo el beneplácito de la comunidad sino el respaldo económico que fuera necesario para llevarla a efecto; sin embargo, resulta que no, que ante la falta de apoyo sus integrantes se vieron obligados a cancelar la campaña decembrina que tenían proyectada, que de acuerdo a su presidenta incluía spots en radio, televisión, prensa, pantallas panorámicas, pláticas en escuelas y visitas a antros, con el objetivo de alertar a los jóvenes de los peligros de conducir en estado de ebriedad. Los efectos que esto habrá de acarrear sobre la comunidad son evidentes: más alcohol en las calles y en las casas, y en consecuencia mayores riesgos de accidentes de fatales consecuencias.La negativa del Ayuntamiento de Torreón de respaldar la campaña de NACE bajo el ridículo e inconcebible argumento de que "no hay dinero", merece pública condena porque con ello la autoridad municipal, léase José Ángel Pérez Hernández, se ubicó objetivamente del lado de quienes no les preocupa la inseguridad que provoca la ingesta inmoderada de alcohol en el municipio, es decir se ubicó del lado de quienes viven de emborrachar a los consumidores, no del lado de los intereses de la comunidad que supuestamente dice representar.Si el Ayuntamiento no apoyo a NACE con los recursos que solicitaba, en bien de la comunidad y en particular de los jóvenes en una época en la que tantos peligros acechan, no fue por falta de dinero como dijo el tesorero Enrique Sada, sino porque el interés del alcalde es proteger los intereses de las grandes empresas cerveceras por encima de los de la colectividad que dice representar. Habría que recordar que este año el Ayuntamiento ejerció un presupuesto de más de mil 300 millones de pesos, el más alto en la historia del municipio, por lo que decir a la agrupación NACE que "no hay dinero" es un insulto a la inteligencia y una declaración abierta de cuáles son los verdaderos valores sociales de la autoridad de Torreón, la promoción del alcoholismo y la defensa de los intereses de las cervecerías, que fueron algunos de los principales contribuyentes en la campaña electoral de Pérez Hernández.Organizaciones como NACE son de vital importancia para la comunidad, por lo que el trato que recibió del alcalde y su Ayuntamiento es totalmente inaceptable. Más, mucho más gasta el municipio en tonterías como aquella de Torreón Limpio, en el que se dilapidaron millones de pesos sin importar que este año se pagarán a PASA más de 90 millones por limpieza, que en lo que pedía NACE, apenas un millón. Es el colmo.