martes, septiembre 18, 2007
SOSTIENE MOREIRA
Ciro Gómez Leyva
“Es muy sencillo: dije esto porque ayer fue el desfile en mi estado y ahí me preguntaron los periodistas”. Es el gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, a propósito de sus juicios fragosos contra la reforma electoral. Mientras algunos trataban de hacer fuego en Toluca con el gobernador Enrique Peña Nieto, Moreira incendiaba la pradera. Y hacía que se prendieran alertas rojas, azules y amarillas. ¿Cuántos moreiras lo podrán seguir? Se necesitan otros 16 para frenar la norma que impide a los políticos comprar tiempo en radio y televisión.Sostiene Moreira (quien arrasó con 57 por ciento de los votos en 2005; en diputados, el PRI ganó 16 de los 20 distritos) que la reforma es un insulto al pacto federal, pues entre otras malas cosas permite que “extraños vengan a organizarnos nuestras elecciones”. Él quien, según conocedores, se piensa con posibilidades de ser candidato del PRI a la Presidencia de la República y, por tanto, requiere de spots nacionales. Un joven exitoso y con carisma que, además, sería uno de los ahijados predilectos de la maestra Elba Esther Gordillo, imbatible en los comicios, según el mito en boga.Y sostiene que platicó con los diputados del PRI en Coahuila y el sentir que recogió fue de absoluto rechazo a la reforma.—Pero, Humberto, todos los senadores del PRI, excepto Jorge Mendoza, y todos los diputados federales votaron a favor —trato de llevarle la contra.—Pues aquí en Coahuila todos los diputados, todos, el cien por ciento de los diputados locales del PRI en mi estado, están contra esa reforma —me cierra el paso.¿Todos? Todos, sostiene Moreira, como si quisiera hacerme comprender que todos los jefes de la Ciudad de México están locos.